
Navidad... La fiesta más dulce. Las calles están inundadas de mil olores, mazapán, turrón, buñuelos, algodón de azúcar y lo menos dulce pero no menos exquisito, castañas asadas.
Las castañeras, esas mujeres que llenan nuestras calles de una falsa niebla cálida y espesa.
En los lugares como este, en los que nunca nieva, es lo más parecido que tenemos a una "blanca navidad", como suelen decir.
Aunque he de confesar algo; amo la navidad.
Sé que es una época consumista y blaablaablaa, todos esos argumentos hippies - a los que, por cierto, no les falta razón-. Y que es la época más hipócrita del año, en la que todos aman y ayudan a todos incluyendo...